El otro día orando, Dios trajo a mi memoria esta frase muy conocida que dice "el que esta de rodillas ante Dios, puede estar de pie ante cualquier circunstancia" que palabras llenas de sabiduría. Es difícil permanecer de pie ante las adversidades, pero que esperanzador es saber que Dios quiere darnos esa fortaleza.
Nadie dijo que sería sencillo, pero si permanecemos en oración podemos salir victoriosos de cualquier dificultad. La escritura nos enseña "Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil" (Mateo 26:41). Somos propensos a caer en la tentación, pero la cita que leímos nos enseña que orando y velando podremos pasar por encima de ella. Que vendrán tropiezos, si, pero hay de aquel por el cual vengan. No debemos sentir fatiga por las luchas, ya que el Espíritu Santo ha prometido estar con nosotros hasta el fin del mundo. ¿Acaso no nos ha guardado hasta el día de hoy? ¿Porque ante esta circunstancia debería ser diferente si el es fiel? Aunque todos fallen, el sigue allí, indicándonos que aun falta camino por recorrer... que aunque estamos derribamos, aun no destruidos. Es hora de ponernos de pie, y seguir adelante, mirando la cruz, ese bello gesto de amor, por nosotros, solamente no te detengas, doblas tus rodillas y que suba tu clamor a aquel creador de todo, Dios.
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